Talleres de Córdoba cerró a su primera incorporación en el mercado de pases: Rick Lima Morais, un extremo brasileño que arriba desde el Ludogorets de Bulgaria. El futbolista de 25 años firmará un contrato por cuatro años con el club cordobés, en una movida que sorprende debido a la escasa presencia de futbolistas brasileños en el fútbol argentino.
Rick llega tras ser una figura destacada en el Ludogorets, donde disputó 122 partidos desde su arribo en 2022, marcando 20 goles y aportando 28 asistencias. Su regularidad en el equipo búlgaro se refleja en su reciente participación el pasado 19 de diciembre, cuando anotó un gol y dio una asistencia en la victoria 4-2 frente al Botev Plovdiv.
Sin embargo, el tanto “Maradoniano” que se volvió viral en las últimas horas lo anotó el 3 de noviembre de 2022 ante la Roma, por la UEFA Europa League. Rick arrancó la carrera en su campo sin que lo pudiera alcanzar ningún rival y sacó un gran remate desde afuera del área para poner el 1-0. El debut profesional del brasileño fue en 2019 con el Ceará, donde se destacó hasta su venta al Ludogorets por aproximadamente 800.000 dólares.
El recorrido de Rick tiene aspectos peculiares. Inició su formación deportiva en el fútbol sala en su ciudad natal, San Luis, Brasil. Posteriormente, jugó en Boca Júnior, un modesto club de Cristinápolis, estado de Sergipe, que rinde homenaje al elenco xeneize de Argentina, usando sus mismos colores e incluso adoptando costumbres del barrio de La Boca.
La llegada del extremo de 25 años busca reforzar el plantel dirigido por Alexander Cacique Medina, quien adoptó un enfoque selectivo en el mercado de pases. Talleres priorizó mantener la base del equipo de la temporada pasada, aunque ya cuenta con las salidas de Franco Moyano, Ramiro Ruiz Rodríguez, Lautaro Morales y Joaquín Blázquez, este último transferido a Independiente.
Además de la incorporación de Rick, Talleres está cerca de sumar a Joaquín Mosqueira, procedente de Unión de Santa Fe, en una operación que incluiría la cesión de David Romero al club santafesino. A esto se suma el regreso de Nahuel Bustos, quien volvió tras su préstamo en San Lorenzo.
Historia del Sociedade Boca Júnior Futebol Clube
El Sociedade Boca Júnior Futebol Clube es un club brasileño fundado en 1993 en Cristinápolis, estado de Sergipe. Su nombre y colores son un homenaje a Boca Juniors, y el equipo adoptó tradiciones propias del club argentino, como el uso de camisetas similares y costumbres vinculadas al barrio de La Boca. Incluso, su presidente, Gilson Behar, demostró su pasión por Boca al nombrar a su hijo Rikelme en honor a Juan Román Riquelme, ídolo y actual mandatario xeneize.
El club inició su participación profesional en la Liga Estadual Profesional del Estado de Sergipe en 2004. En su temporada debut, logró consagrarse campeón de la División A-2 tras vencer en la final al América Futebol Clube de Propiá, lo que le permitió ascender a la primera división. Sin embargo, su desempeño en la máxima categoría fue irregular, alcanzando el cuarto lugar en 2005 y descendiendo al año siguiente. Boca Júnior volvió a la División A-2, donde consiguió otro título y un nuevo ascenso en 2007, aunque descendió nuevamente en 2008.
Una de las anécdotas más llamativas del club ocurrió en 2006 cuando enfrentaba dificultades financieras. En ese contexto, decidieron rifar una camiseta firmada por Carlos Tevez, quien brillaba en el fútbol brasileño, para recaudar fondos. Además, Boca Júnior compartió categoría con el Sociedade River Plate de Carmópolis, generando una curiosa coincidencia con la histórica rivalidad entre Boca Juniors y River Plate en Argentina.
El club también contó además con patrocinadores poco convencionales, como el grupo musical de forró “Mujeres Perdidas”, reflejando la identidad cultural del noreste brasileño. Esta combinación de elementos futbolísticos y culturales convirtió a Boca Júnior en un club singular dentro del fútbol de Sergipe.