Las empresas dedicadas a la salud y bienestar ofrecen algunas recomendaciones para reducir y manejar el estrés. Entre ellas, destaca la importancia de saber detenerse, relajarse y reflexionar sobre las causas del mismo. Esta pausa permite calmarse, tomar decisiones con mayor claridad y adoptar cambios en la actitud que contribuyan a disminuir sus efectos. Existen múltiples formas de lograrlo y te contamos cuáles son.
Estas son las seis estrategias para calmar el estrés
- Aprovechar los momentos agradables que brinda la vida, como salir con amigos, dar un paseo, hacer una escapada de fin de semana, o asistir al cine o al teatro, puede ser muy útil para romper con la rutina estresante y tomar distancia de aquello que genera malestar.
- Mantener una alimentación equilibrada también contribuye a reducir el estrés. Es recomendable optar por comidas ligeras y saludables, comer despacio, masticar bien y evitar platos muy abundantes, pesados o muy condimentados.
- Tomarse un baño caliente es otra estrategia eficaz, ya que favorece la relajación y ayuda a aliviar la tensión muscular acumulada.
- No aislarse es fundamental: al quedarse solo, es común caer en pensamientos repetitivos sobre lo que genera el estrés, lo cual puede intensificarlo.
- Modificar las rutinas también puede ser beneficioso en momentos de tensión. Hacer cambios, aunque sean pequeños, permite desconectar y renovar la energía.
- Delegar es clave, especialmente cuando el estrés proviene del entorno laboral. Es esencial aprender a compartir responsabilidades con el equipo, entender que no todo puede ser controlado y que la sobrecarga puede evitarse con una buena organización y colaboración.
¿Qué no hacer en casos de estrés?
Según MedlinePlus, se aconseja evitar calmar el estrés de formas poco saludables. Cuando una persona se siente estresada, puede recurrir a hábitos poco saludables en un intento de aliviar la tensión. Entre estos comportamientos se encuentran:
- Comer en exceso
- Fumar
- Consumir alcohol o drogas ilegales
- Dormir en exceso o, por el contrario, dormir muy poco
Aunque estas conductas pueden ofrecer una sensación momentánea de alivio, a largo plazo resultan perjudiciales y pueden empeorar la situación. Por eso, es preferible optar por estrategias saludables para manejar el estrés, como las que se mencionaron previamente.
Por Estefanía Mayorga Rincón