Llegó el agua y trajo alivio luego del calor extremo que se sufrió en el AMBA el fin de semana y el lunes. Sin embargo, el clima deambula en la Ciudad de Buenos Aires de un fenómeno peligroso a otro. Este miércoles 5 de febrero el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta naranja por fuertes tormentas en la Capital y el Conurbano, que se materializó con un temporal de viento y agua que causó destrozos en algunos barrios porteños e inundaciones en varias localidades bonaerenses.
En Almagro, el viento tumbó un imponente árbol que cayó encima de un auto, que fue literalmente aplastado. El hecho se produjo en Díaz Vélez al 4200, por lo que la Policía de la Ciudad y los servicios de emergencia debieron cortar el tránsito en la intersección con Gascón.
Además, en distintas localidades del conurbano bonaerense se registraron inundaciones debido a la gran cantidad de agua que cayó en pocas horas. Uno de los distritos más castigados fue Merlo, donde varios calles quedaron bajo. Escenas similares se repitieron en otras ciudades bonaerenses como Valentín Alsina, Quilmes y Brandsen.
La alerta naranja por tormenta que emitió el SMN se mantiene pasadas las 15 y prevé que las áreas afectadas tendrán “lluvias intensas y tormentas, algunas localmente fuertes”. “Las mismas estarán acompañadas por ráfagas que podrían alcanzar los 80 km/h, granizo, fuerte actividad eléctrica y especialmente abundante caída de agua en cortos períodos. Se prevén valores de precipitación acumulada entre 60 y 90 mm, pudiendo ser superados en forma puntual”, señalaba la advertencia del organismo.
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Un árbol aplastó un auto en Almagro
Este nivel de advertencia rige para la Ciudad y el Conurbano, además de gran parte del norte y centro de la Provincia de Buenos Aires, abarcando desde el Partido de la Costa, Chascomús, Ledesma y Pila hasta Baradero, San Pedro y General Villegas. También se extiende al sudeste de Santa Fe y el sur de Córdoba.
Algo más leve serán las precipitaciones que afectarán a las localidades bajo alerta amarilla, aunque este grado de aviso implica fenómenos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas.
Este miércoles rige para casi todo Entre Ríos, el este de Santa Fe, centro de Córdoba y este de La Pampa y Río Negro, además del resto del territorio bonaerense. En el extremo sudoeste de Santa Cruz hay alerta, pero por lluvias.
En el AMBA el pronóstico del tiempo emitido por el SMN preveía que las fuertes tormentas continuaran durante la tarde, mientras que hacia la noche cesarán las precipitaciones. La temperatura se mantiene estable, con un pico inferior al pronosticado: 22,9 grados a las 14 (se preveía una máxima de 25 grados).
El clima luego volverá a la tendencia seca que predomina esta verano, ya que al menos hasta el martes no volvería a llover en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores.
Pero de a poco volverá el calor, con un ascenso escalonado de la temperatura. La máxima prevista para mañana es de 29 grados; para el viernes, 30°; el sábado, 32°; y el domingo, 31°. El lunes volverá a ser agobiante, con un pico de 35 grados.
D.D. / A.G.E.