En la mañana del 22 de enero, las autoridades capturaron a César Antonio Rodríguez López, señalado como el padrastro y principal responsable de la muerte de un bebé de un año, ocurrida el pasado 20 de enero en la localidad de Kennedy, en el sur de Bogotá.
El sospechoso fue aprehendido en un puesto de control terrestre en la ciudad de Valledupar, departamento del César. Al parecer, iba al interior de una tractomula como polizón, según información suministrada por Noticias Caracol.
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En el momento en el que se realiza la inspección den vehículo se verifica la identidad del sujeto, los uniformados se percataron de su identidad y proceden con la captura. De acuerdo con la información preliminar, Rodríguez López debio ser trasladado a un lugar donde se pudiera realizar su detención mientras se emite una orden para su captura, pues hasta el momento, si bien es el principal sospecho, no era requerido de manera oficial.
Eduardo Chamorro, comandante de la Policía del Cesar entregó detalles del procedimiento que se llevo a cobo en el puesto de controlconocido como “Los Cauchos”, en inmediación es del ingreso a la captial del César: “Lo capturamos con el personal de Tránsito y Transporte al realizar los controles correspondientes. Identificamos a esta persona y la dejamos a disposición de las autoridades competentes para su judicialización”.
César Antonio Rodríguez López, de 28 años, nació en la región de la Costa Caribe y llegó a Bogotá en busca de oportunidades laborales. Según información de vecinos de la familia, trabajaba en una montallantas ubicada en el sector de Las Américas, en la capital del país.
Este hombre es señalado como el padrastro y presunto responsable de la muerte de un bebé de un año, caso que ha generado indignación en la localidad de Kennedy y que lo tiene actualmente en proceso de judicialización con las autoridades correspondientes.
El incidente ocurrió alrededor de las 6:35 p. m. del lunes, dentro de una vivienda ubicada en el barrio María Paz, en la localidad de Kennedy. Según las autoridades, César Antonio Rodríguez López se había quedado solo en casa con los dos menores mientras la madre de los niños trabajaba como guarda de seguridad en una zona cercana.
Momentos después, los vecinos escucharon gritos de auxilio provenientes del lugar y alertaron a las autoridades. Al llegar, los uniformados encontraron una escena desgarradora: el niño más pequeño había fallecido debido a los golpes recibidos, mientras que su hermano estaba gravemente herido.
El menor herido fue trasladado de inmediato a un hospital cercano, donde el personal médico confirmó que presentaba un edema en la cabeza como resultado de los actos de violencia sufridos. El caso ha generado indignación y repudio en la comunidad.
Eduardo Cruz, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, informó que: “sobre las 18:30 p. m. atendimos un llamado en una vivienda. Encontramos a dos menores: uno de ellos estaba muerto por causa de los golpes y el otro se encuentra lesionado”, además, añadió que este tipo de actos son rechazados de manera contundente por la sociedad, aún más, cuando implican a menores de edad, “Tenemos una rabia social y un profundo rechazo por estos hechos. Nos solidarizamos con la familia y esperamos que sucesos como este no se sigan registrando en Bogotá”.