El PP ha presentado en la Asamblea de Madrid una proposición de ley para modificar las leyes trans y de protección de las personas LGTBI que fueron ya modificadas a finales de 2023. Estas normas, que salieron adelante con el apoyo de Vox, fueron recurridas por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional y parcialmente suspendidas. Su nueva propuesta supone una enmienda a lo aprobado, entre otras cosas, porque limita la obligatoriedad de los informes psicológicos que exigía para el cambio de sexo de los menores, una de las cuestiones que fue más criticada por la izquierda, que consideraba que se volvía a «patologizar» a los más jóvenes cuando la ley estatal ya había eliminado esta parte del proceso.
A través de una nota de prensa, el grupo popular ha informado esta mañana de los cambios, apuntando que el objetivo es introducir «mejoras técnicas y de redacción de acuerdo con las recomendaciones del Consejo de Estado» emitidas tras la modificación de dichas leyes. Defiende, igualmente, que la modificación original del año pasado pretendía «proporcionar mayor claridad y seguridad jurídica y, así, garantizar la protección y asegurar la igualdad efectiva entre todos los ciudadanos, dando especial relevancia a la protección de la infancia, la profesionalización de los servicios y el rigor jurídico». Pero no dan mucho más detalle.
Modificaciones
Desde el PSOE, su portavoz en la materia Santi Rivera, ha aplaudido a través de la red social X esta modificación, aunque la considere insuficiente. Explica Rivera, en conversación con este periódico, que hay dos cambios básicos en la propuesta del PP que consideran un «éxito» de la presión política y fruto del recurso presentado por el Gobierno ante el TC. La ley vigente, explica, exige dos cosas obligatorias para que los menores puedan acceder al tratamiento. Por un lado, acompañamiento psicológico durante todo el proceso de cambio de sexo. Por otro, un informe psiquiátrico. «Ahora ese informe solo lo exigen para los menores con patología mental previa», detalla. Esta es precisamente una de las cuestiones que quedó en suspenso tras la admisión del recurso del Gobierno de la nación.
El otro cambio que los socialistas consideran fundamental es sobre el acceso de los menores trans a los vestuarios de lugares públicos. Antes se permitía con una salvaguarda que señalaba que solo podrían hacerlo siempre que no atenten contra la dignidad de otras personas, algo pensado especialmente para una mayor protección de las mujeres. Ahora ese requisito se suaviza. Se añade que se garantizará el derecho e intimidad del alumnado trans en las actividades diferenciadas por sexo en los centros educativos y que «se adoptarán las medidas necesarias para que los espacios o equipamientos identificados en función del sexo, en los centros de menores, pisos tutelados, centros de atención a personas con discapacidad, residencias de la tercera edad o en cualquier otro recurso que acoja a personas especialmente vulnerables». Los socialistas consideran que se estigmatiza menos a las personas trans.
Sin debate en lectura única
Según explica Efe, los populares solicitan que esta modificación se realice a través de lectura única -lo que impide el debate parlamentario- y en la explicación de motivos se detalla que el objetivo es «corregir aspectos de la redacción original de las leyes que eran susceptibles de conculcar derechos fundamentales, al tiempo que se adaptaban las leyes autonómicas a la regulación estatal recientemente aprobada».
El texto especificará, añade, que se prohibirá «expresamente el uso en el sistema sanitario de la Comunidad de Madrid de terapias aversivas y de cualquier otro procedimiento que suponga un intento de anulación de la personalidad o voluntad de la persona transexual, así como cualquier otra vejación, trato discriminatorio, humillante o que atente contra su dignidad personal».