Fue la noche del Colibrí. Fue la noche de Miguel Borja, que llenó de gol el Monumental. Dos penales y una media vuelta letal. Así, el delantero colombiano construyó un triplete, el segundo en River (el anterior fue a Vélez), y llegó a los 45 goles con la camiseta del Millonario en 87 partidos.
Con esta marca, el goleador que jugará la Copa América con Colombia, pasó al uruguayo Antonio Alzamendi (43) e igualó a su compatriota Radamel Falcao en la tabla de máximos artilleros extranjeros del club de Núñez. Y quedó a dos del chileno Marcelo Salas (47), el quinto de esa lista top que lidera Enzo Francescoli (137).
Borja alcanzó a su vez el cuarto lugar entre los goleadores mundiales del 2024: lleva anotados 22 en 25 encuentros disputados hasta el momento. Quedó detrás de Kylian Mbappé (23), Enes Shain (24) y a cinco de Akram Afif y Viktor Gyökeres que lideran la tabla anual de goleadores con 26.
«Gloria a Dios por todo. Primero porque ganamos y después por lo personal que es algo muy bonito que me motiva a seguir trabajando. Mi idea de este año es poder estar a la par de lo que hice en 2016, que también tuve números muy buenos», dijo Borja con la pelota bajo el brazo antes de entrar al vestuario del Monumental.
El colombiano pudo haber hecho más tantos y hasta se lo vio fastidioso cuando no se la pasaban. «Estuve cerca del cuarto. Los compañeros me asistieron muy bien. En el primer tiempo hice una muy linda con Claudio (Echeverri)», se mostró conforme por su performance.
«El segundo gol se dio porque me quedé en el área como me dijo Demichelis. Enfrentamos un equipo que juega bien, nunca la tira larga y siempre sale jugando», agregó sobre el consejo del entrenador y le tiró una flor a Tigre, de quien fue verdugo.
Ahora, a pensar en la Copa América: «Estoy con toda la motivación para aportar en la selección. Tenemos un lindo nivel y esperemos aportar lo propio».