Elon Musk tenía una reunión pautada en SpaceX, compañía de la que es CEO. No era una más, sino un “all hands”, como se dice en el mundo corporativo: toda la empresa lo estaba esperando. Llegó una hora tarde. Luego de 15 minutos de hablar incoherencias, susurrando, con gestos extraños, el presidente de la compañía tomó la posta. Y todos se preguntaron lo mismo: ¿estaba drogado?
Según él mismo, no. El magnate aseguró que no se encontró «ni rastro» de drogas en su organismo después de tres años de pruebas aleatorias, en respuesta a un artículo de The Wall Street Journal que se hacía esta pregunta a partir de fuentes internas que contaron, off the record, esta particular situación. Y la respondieron de manera positiva.
En la nota, publicada este sábado, se contaba que Musk se mostró inusualmente incoherente cuando subió al escenario frente a sus empleados de SpaceX para hablar del desarrollo del prototipo del cohete Big Falcon de la empresa, y un ejecutivo describió el acto al medio como «disparatado», «desquiciado» y «cringe-worthy”: cringe, en inglés, puede traducirse como vergüenza ajena.
Según la investigación del Wall Street Journal, Musk habría consumido drogas como LSD, cocaína, éxtasis, hongos psicodélicos y ketamina en fiestas privadas, donde los asistentes debían firmar acuerdos de confidencialidad o entregar sus teléfonos.
El medio cita a fuentes anónimas que aseguran haber presenciado el consumo de drogas de Musk, y que expresan su preocupación por las posibles consecuencias en su salud y en el futuro de sus compañías.
En un mensaje en su red social, X (antes Twitter), Musk explicó que la NASA le pidió someterse a tres años de controles aleatorios, después de que el empresario apareciera en el podcast de Joe Rogan fumando marihuana, en 2018.
After that one puff with Rogan, I agreed, at NASA’s request, to do 3 years of random drug testing.
Not even trace quantities were found of any drugs or alcohol. @WSJ is not fit to line a parrot cage for bird 💩
— Elon Musk (@elonmusk) January 7, 2024 «No se encontró ni rastro de drogas o de alcohol«, escribió Musk en la mañana del domingo.
Pero las dudas persisten.
“Musk consumió LSD, cocaína y éxtasis”
FILE PHOTO: Elon Musk, chief executive of Tesla, as he attends the Viva Technology conference dedicated to innovation and startups at the Porte de Versailles exhibition centre in Paris, France, June 16, 2023. REUTERS/Gonzalo Fuentes/File PhotoEl mensaje respondía a un usuario de X comentando el artículo de The Wall Street Journal, en el que el medio cita a fuentes «cercanas a Musk» que están preocupadas por su uso continuado de drogas, y en especial de ketamina.
Uno de sus abogados aseguró al medio que el empresario se somete regularmente a pruebas de drogas en SpaceX y que «nunca ha fallado ningún test».
Musk, de 52 años, ha recibido críticas casi constantes por su comportamiento errático, y en especial tras la compra de la red social Twitter, en 2022. Desde entonces, la plataforma ha sufrido numerosas transformaciones, ha cambiado de nombre, y sufre un boicot de anunciantes después de que el propio Musk publicara un mensaje apoyando una teoría de la conspiración antisemita.
Musk es, además, director ejecutivo del fabricante de coches eléctricos Tesla y de la compañía aeroespacial SpaceX.
Musk y las drogas: una postura controversial
Video
El magnate Elon Musk fumó marihuana en vivo
La postura de Elon Musk frente a las drogas es ambigua y contradictoria. Por un lado, el fundador de Tesla y SpaceX ha negado consumir drogas ilegales y ha afirmado que se somete regularmente a pruebas de drogas en su empresa espacial, las cuales siempre han dado negativo.
Por otro lado, Musk ha protagonizado varios episodios polémicos que han generado dudas sobre su sobriedad y su comportamiento errático, como fumar marihuana en un programa en vivo con Joe Rogan, usar lenguaje vulgar para referirse a SpaceX, o hacer bromas sobre el precio de las acciones de Tesla.
La polémica por el artículo del Journal no es la primera. Musk ya se vio envuelto en una controversia por su relación con las drogas. En septiembre de 2018, el empresario sorprendió al mundo al fumar marihuana en el podcast de Joe Rogan, un popular comediante y comentarista estadounidense.
En la entrevista, Musk también bebió whisky, habló sobre inteligencia artificial, y confesó que a veces se sentía solo y triste. El episodio le costó a Musk una investigación por parte del Pentágono, que revisó su autorización de seguridad federal, y una caída en el valor de las acciones de Tesla.
Musk se disculpó por su conducta y aceptó la petición de la NASA de realizar tres años de pruebas de drogas aleatorias, como parte de los requisitos para transportar astronautas a la Estación Espacial Internacional. Sin embargo, también ha hecho declaraciones que sugieren una actitud permisiva hacia el consumo de sustancias psicoactivas.
En 2019, dijo que el LSD podría ser beneficioso para la creatividad y la innovación, y que no le importaba si sus empleados fumaban marihuana, siempre y cuando no afectara su trabajo.
La postura de Elon Musk frente a las drogas es, por tanto, una paradoja. El hombre que lidera algunas de las empresas más exitosas y revolucionarias del mundo, también se expone a riesgos y críticas por su estilo de vida y sus decisiones personales. Su consumo de drogas, sea real o no, plantea interrogantes sobre su salud mental, su responsabilidad social y su capacidad de liderazgo.
SL